Cuidarse es quererse. Porque nuestro cuerpo va a acompañarnos durante toda la vida y no hay plan B posible. Así es que, si ya has decidido cuidar tu cuerpo, ya has dado el primer paso para estar mejor.

Dentro de las múltiples opciones para mejorar nuestro cuerpo, los tratamientos para el rejuvenecimiento facial son los más habituales. Y a nadie le sorprende que se relacione un determinado tratamiento facial a querer lucir mejor, a destacar la parte estética. Incluso a eso que muchas veces llamamos ‘postureo’, de forma simpática.

La cara es el espejo del alma, reza el dicho, y el contorno facial también muestra tu estado de salud e incluso tu historial médico. Por ejemplo, la cantidad de grasa en el rostro indica claramente tu condición física, incluso mejor que indicadores como índice de masa corporal.

Así pues, cuidarse aporta beneficios estéticos y también médicos, mejorando la salud de la persona.

Llegados a este punto, queremos destacar un tratamiento facial que destaca por sus ventajas, ya no solo en el plano estético sino a todos los niveles de salud.

Hablamos de la radiofrecuencia facial, uno de los tratamientos de rejuvenecimiento del rostro más efectivos que encontrarás actualmente. Y te lo vamos a explicar en detalle.

Conocida como el nuevo lifting sin cirugía, la radiofrecuencia facial es una técnica muy segura, efectiva, indolora y que no requiere de cuidados especiales una vez finalizada la sesión.

Demanda de tratamientos no quirúrgicos

Sin duda, la demanda del público por recibir procedimientos de reducción de arrugas no quirúrgicos ha aumentado drásticamente durante la última década. Y en ello tiene que ver los avances tecnológicos.

Concretamente, la radiofrecuencia ha evolucionado y ya se ofrece un método tripolar, evolución de la radiofrecuencia monopolar y bipolar, ya existente.

 ¿Qué es la radiofrecuencia facial tripolar?

Llegados a este punto, se antoja necesaria una definición de este tratamiento. Podemos definirlo como la aplicación de ondas de radiofrecuencia que producen energía en forma de calor sobre las capas profundas de la piel, provocando la contracción de las fibras de colágeno, responsable de tensar las capas profundas de la piel y fomentando su producción.

El efecto vasodilatador mejora notablemente la circulación de la sangre, favoreciendo el aporte de nutrientes y oxígeno a las células al tiempo que se rejuvenecen los tejidos subcutáneos.

La piel, el órgano más grande del cuerpo humano, optimiza sus niveles de salud, más allá del evidente aspecto joven y radiante.

Se logra una mayor producción de colágeno y elastina y también aumenta el metabolismo celular y se desintoxican los tejidos. Técnicamente, los vasos sanguíneos se ensanchan para aumentar el flujo y alimentar a las células con más oxígeno y nutrientes.

Toda esa sangre que fluye hacia el rostro también elimina los productos de desecho como el dióxido de carbono.

La remodelación dérmica y una piel más saludable son un hecho, con esta técnica. Y conservarás la belleza natural, pero con un efecto rejuvenecedor. Y no solo eso, ya que la radiofrecuencia tripolar también refuerza los contornos faciales.

La importancia del colágeno

¿Sabías que el colágeno y elastina sostiene la dermis y la epidermis, manteniendo la piel flexible y firme?

A partir de los 25 años, vamos perdiendo, cada año, entre el 1 y el 2% del colágeno natural.

Además, las células de la epidermis (parte visible de la piel) no se renuevan tan rápido como en nuestra juventud.

¿Qué propiedades aporta?

Te listamos a continuación los beneficios y propiedades de este tratamiento:

-Piel luminosa y tonificada

-Efecto lifting en cara y cuello

-Arrugas y surcos suavizados

-Piel más tersa y menos flacidez

-Piel con mayor elasticidad

–Reducción de la papada

-Eliminación de bolsas y ojeras

-Suaviza las arrugas de expresión

–Tensa los músculos de la cara

–Elimina cúmulos de grasa en el rostro

-Genera uniformidad, proporcionando un mejor color y tono al cutis

Como un masaje tibio

Acerca de las sensaciones de tratarse con radiofrecuencia tripolar, dada su naturaleza no invasiva, te gustará si eres de esas personas que nos son muy amigas de las agujas. La sensación es la de un rodillo tibio que masajea tu cara, deslizándose sobre la piel en círculos, de manera consistente.

Cualquier hombre o mujer puede beneficiarse del tratamiento, siempre y cuando no tenga ninguna enfermedad o infección cutánea en el área a tratar.

En Body Zenter realizamos un sencillo test de aptitud antes de llevar a cabo la primera sesión de radiofrecuencia facial tripolar. Si has decidido cuidarte, consúltanos sin problema.